Sociedad informada

Estoy a punto de padecer insomnio. Trato de leer algún libro y no lo termino, entonces recurro a los diarios o a los noticieros; y es entonces cuando me salta la sangre al ojo, cuando la decepción es brutal, cuando la explicación queda clara del porqué.

Es que ya es clarísimo que la prensa peruana en general ha captado el mensaje de que debe integrarse al sistema, defenderlo y debe propiciar el status quo, y la inmundización de la sociedad peruana. Es decir; tenerla idiota, venderle cuentos bíblicos para que no crea en sí misma y hacerle creer que cualquier cambio por ligero que sea; es la catástrofe.

Pero para mí ese no es el problema para mí el problema es que nuestra sociedad de individuos le preste ciegamente oídos, es que la prensa peruana no informa. No me importa su sesgo, ni su ideología -que es ultramontana y ultraconservadora- pero es una prensa derechista que no informa.

Puedo entender y tolerar que haya una prensa derechista, lo que no entiendo es que la prensa derechista decida no informar y eso es lo que hacen los diarios y los noticieros en general, no informan. Por ejemplo, en relación a la crisis económica nadie podrá saber la magnitud de la crisis que tenemos, leyendo a la prensa formal, hay que recurrir a los blogs, a la prensa extranjera. Sin ir muy lejos; la prensa peruana no nos informa de la peor crisis del capitalismo salvaje en 50 años que padece EE.UU. muy pocos lo saben y eso dice mucho del poco esfuerzo de nosotros mismos de informarnos realmente, creemos en lo primero que nos dicen.

Y eso es una superficialidad que los diarios y noticieros desean, porque la prensa tampoco discute ideas, la prensa frivoliza todo, personaliza, no contribuye en nada a mejorar el nivel del debate. Por eso nuestra sociedad no es democrática como tendencia porque venimos de grandes periodos históricos en donde fuimos vasallos, como el imperio de los incas, el largo virreinato, la república de los caudillos militares. Si condensáramos toda la historia del Perú en un año; solo un mes se vivió en democracia, toda esa historia es la que la gran mayoría desconoce.   

Esta crisis de información, de educación; hace que se confunda democracia con un caño de agua y un desagüe. El gran drama del peruano es creer que la pendejada sustituye al saber, y que al final lo importante es vivir la vida en cervecita con amanecida y sin ideales que hagan pensar demasiado, porque la idea final es la simpleza de estar contento.

Ahora hay un bien disimulado contento en relación a la ignorancia, la ignorancia se ha vuelto una virtud y claro como entre ignorantes no se pueden juzgar; la impunidad es absoluta. Un locutor que dice una barbaridad que es oído por un oyente castrado en cultura, lo que produce es una comunicación perfecta, una sinfonía bárbara: Unos actores que hacen estupideces da un rating espectacular a las series en el fondo necias y a esos programas de espectáculo TV nauseabundos.

Por alguna razón, que no se responderme, se me viene a la memoria esta pregunta ¿Cuándo se había jodido el Perú? como se interrogaba a sí mismo el “pituco” Santiago Zavala en el pórtico de la novela Conversación en La Catedral. Y sinceramente creo que existen muchas respuestas: Una es quizás cuando la gente decidió ya no informarse, sino que la informen.

Pero la respuesta más sensata creo que es; en el momento en que la cultura y la inteligencia se fueron a lados diferentes, entonces empezamos a jodernos y llegamos a esta medianía afásica, gente que no puede hablar porque no sabe pensar y son lo que hacen política, promulgan leyes y juegan vóley, son de algún modo la encarnación de lo que hemos venido a ser. Porque votamos cada cinco años y lejos de avanzar estamos en reversa; PPK con 18% de electorado, Kenji Fujimori es el más votado del congreso y Keiko Fujimori = Alberto Kenya Fujimori Fujimori en segunda vuelta. El Perú es un país que tiene la marcha en reversa siempre disponible y creo que hace más 20 años estamos en reversa, ideológicamente hablando.

Es muy necesario preocuparnos del presente coyuntural, por supuesto que soy consciente de que son muy pocos los que se informan. Pero es necesario dejar atrás el unga! unga! unga! cavernario y darse cuenta que detrás de ese PPkuy que la juventud desinformada puso de moda unos días, está otro cuy de peluche que disfraza a una chinita cachetona que se hace la inocente.

No hay una alianza o un frente en contra de esta “gonorrea naranja” que quiere volver a visitarnos, somos cada uno de nosotros los que podemos evitar, con el uso de la democracia en nuestro voto, que el chino se burle de nosotros. Corremos el riesgo de que la hija del ladrón y asesino Alberto Fujimori regrese. Aquí hay un solo adversario, pero ya no del sistema –en el que no creo- sino un adversario del país: el fujirmorismo”.   

Finalmente los medios de comunicación quieren lobotomizar en la mente de los peruanos el tema de una competencia entre dos museos de los horrores políticos, la frase del politólogo Steven Levitsky es elocuente: “Se puede tener dudas de Humala, pero de Keiko tenemos pruebas”.

Ahora; los pasivos de Humala son reales, pero infinitamente menos contundentes. Casi todos tienen que ver con lecturas pobres de la realidad, o declaraciones poco afortunadas, o gestos destemplados. A diferencia del Fujimorismo, Humala parece, sincera o tácticamente, dispuesto a aprender de la experiencia propia como ajena.

Saquen su propia conclusión y no permitamos el retorno de la “gonorrea naranja”.